En el marco del concepto de UNA SALUD, la salud de los peces debe ser considerada en su interrelación con la salud humana, la salud de otros animales y la salud del ecosistema. Del equilibrio de estos elementos depende la sanidad de las granjas de producción piscícola. Los caninos ferales y mascotas en sistemas de producción acuícola pueden representar un riesgo inminente para la salud del sistema de producción de peces, dada la posibilidad de traslado de microorganismos patógenos de los peces adheridos a las patas, pelo y/u hocico, como fómites, al contacto de los perros con la mortalidad por consumo o por interacción directa al ingreso en los sistemas de producción. Con el fin de analizar, mitigar y reducir el riesgo del transporte de enfermedades entre granjas, se desarrolló el presente proyecto con el objetivo de evaluar el impacto generado por caninos y felinos como portadores pasivos en la transmisión de patógenos en 10 centros de producción de tilapia en la represa de Betania, Huila, Colombia durante el segundo periodo del año 2023. Se desarrolló y evaluó una encuesta epidemiológica que incluía los principales factores de riesgo de los caninos como fómites de patógenos para peces y se incluyó además aspectos asociados al riesgo de salud pública por su contacto con sus propietarios o humanos con los que interactuan en los sistemas de producción.
El 71% (44/62) de los caninos presentes en la represa de Betania, Huila no se encontraban vacunados contra la rabia, siendo un riesgo bastante alto para las personas que allí habitan considerando que el Huila es una zona endémica de rabia silvestre y doméstica. El 31% de la población de caninos, no se encuentraron desparasitados, lo que refuerza el riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas. Existe mayor presencia de machos que de hembras, correspondiente al 61% de machos, y en total solo el 8% de los caninos ha sido esterilizado. El 71% de la población canina, consume peces muertos constantemente, como parte de su dieta, siendo el consumo de carne cruda el vehículo por el cual el canino entra en contacto con patógenos que posteriormente pueden ser transmitidos al ser humano u otras especies animales y que pone en riesgo la barrera de especie favoreciendo la adaptación de patógenos acuícolas en mamíferos.
El 87% de la población canina no se encuentra en estado de confinamiento, permitiendo la movilidad de los animales de un lugar a otro dentro de la represa. Estos se movilizan ya sea a través de los ferris o nado, como se pudo corroborar, mediante identificación del canino y evidencia fotográfica, del traslado de un canino desde el puerto a una de las piscícolas ubicadas en la parte más alta de la presa al ingreso del rio Magdalena.
En el desarrollo del proyecto se implementó una jornada de vacunación de los animales en las diferentes áreas de producción para mitigar el riesgo de transmisión de las enfermedades zoonóticas y su afectación a la población humana presente en los sistemas de producción acuícola de la represa de Betania, Huila. Se requiere implementar jornadas de esterilización y mejorar las prácticas acuícolas eliminando la práctica de alimentar los caninos con restos de mortalidad de tilapia.