Prochilodus magdalenae, comúnmente conocido como bocachico, es una especie de gran importancia ecológica y socioeconómica en la región del río Magdalena, Colombia. El bocachico es fundamental para las pesquerías de la cuenca del Magdalena y desempeña un papel crucial en la dinámica ecosistémica. Sin embargo, la contaminación del agua ocasionada por diversos compuestos, entre ellos metales pesados, como el cadmio (Cd) y el plomo (Pb), representa una amenaza significativa para su supervivencia. Estos metales, introducidos en el ambiente acuático a través de actividades industriales y agrícolas, pueden tener efectos tóxicos graves en la biota acuática, incluyendo la mortalidad, efectos subletales y biomagnificación.
El objetivo de este estudio fue investigar los efectos tóxicos del Cd y Pb en la sobrevivencia y comportamiento a las 96 horas después de exposición aguda por 96 horas de inyección en la base de la aleta pectoral. Se establecieron grupos de tratamiento cada uno con 4 hembras y 4 machos, un control negativo y once tratamientos con diferentes concentraciones de Cd y Pb (Tabla 1). Se registraron tallas entre 16,4 y 27,5 cm de longitud estándar (LS) y entre 19,9 y 33,5 cm de longitud total (LT), peso inicial entre 94 y 326,8 g y un peso final entre 110 y 370 g.
Los resultados revelaron que algunos individuos presentaron aislamiento, movimientos letárgicos, pérdida del eje de nado, y movimiento opercular con marcada aceleración al respirar en la superficie. La mortalidad se observó principalmente en machos, y fue significativa en el tratamiento binario con Cd 0.8 y Pb 14 μg/Kg, sugiriendo un sinergismo tóxico entre altas dosis.
De igual manera, en algunos estudios se han encontrado concentraciones de plomo en peces comercializados en la plaza de mercado de la ciudad de Barranquilla, con valores máximos de 0,676 μg/g para el plomo en el músculo (Meza & Rincón, 2016), siendo este un posible riesgo no solo para la salud humana, si no para la salud del ecosistema. En conclusión, este estudio proporciona evidencia sobre la toxicidad combinada de Cd y Pb en P. magdalenae y subraya la necesidad de monitorear y regular la contaminación por metales pesados en los cuerpos de agua para proteger las poblaciones de esta especie y otros organismos acuáticos. Los hallazgos sugieren implicaciones ecológicas significativas y la urgencia de estrategias de mitigación para prevenir los efectos adversos de estas sustancias tóxicas a largo plazo en ecosistemas acuáticos.
Este estudio hace parte del programa formulado por ISAGEN S.A., dentro del PMA, para la protección del recurso íctico y pesquero en el río Sogamoso.