Los probióticos han surgido como una herramienta para el control de enfermedades en la acuicultura. Las bacterias antagonistas de patógenos bacterianos pueden cumplir una función importante como bacterias benéficas en cultivos de moluscos al ejercer una actividad inhibidora de patógenos y/o mejorar la condición nutricional de las especies en cultivo gracias a la producción de enzimas digestivas. Se probaron 4 cepas bacterianas con potencial probiótico aisladas del intestino del ostión de Cortéz (Cassostrea corteziensis). Se determino el crecimiento, supervivencia y la microbiota intestinal de C. gigas, cultivado en el laboratorio (60 d) y campo (76 d), en un bioensayo con 6 tratamientos por triplicado: I) Control negativo; II) 1f hp-B; III) 1a in; IV) 3M.N Hp; V) 2b.2 man y; VI) Mezcla de aislados. La concentración de cada aislado fue de 1 x 106 CFU/L, añadido cada 4 d en el agua del sistema de cultivo. Se colocarón 15 semillas de ostión/tina (6 mm). Se determinó la composición y abundancia de la microbiota bacteriana en el intestino de juveniles tratados en el TIV y no tratados con probióticos (control) utilizando la metagenómica (secuenciación de la región V3 del gen 16S rRNA). El intestino se colocó en un tubo Eppendorf con 1.3 mL de etanol al 96 % frío y se almacenó a -70 ºC. En el CIAD Mazatlán se extrajo el ADN y se secuenciaron las muestras en un equipo MiniSeq de Illumina. El proceso de construcción de OTUs se llevó cabo en la plataforma Shaman anotando las secuencias con la base de datos SILVA. Se realizó un análisis de diversidad alfa (Shannon, Simpson) y uno beta (análisis de coordenadas principales, PCoA) para analizar las similitudes/diferencias en la comunidad microbiana entre los diferentes tratamientos.
Se observó un aumento significativo en la altura (4.63 ± 0.20 cm), longitud (4.63 ± 0.39 cm) y peso (4.63 ± 0.38 g) en los organismos tratados con Enterococcus sp. (TIV) respecto al control. La supervivencia fue de 70-72 %, no se observaron diferencias significativas entre los tratamientos. El filum Proteobacteria fue el dominante, seguido de Cyanobacteria, Chloroflexi, Actinobacteriota y Firmicutes (Fig. 1). Los géneros más abundantes fueron Sphaerobacter, Devosia, Pseudomonas y Vibrio. No se observaron diferencias significativas (p>0.05) en los fila y en los géneros más abundantes entre el control y el tratamiento con probióticos. La diversidad alfa (Shannon y Simpson) del tratamiento fue similar a la del control (p>0.05). En el análisis de diversidad beta (género) se observó que el control y el tratamiento con probióticos se agruparon relativamente cerca uno de otro, indicando que la composición estructural de la
zcomunidad y la diversidad entre los dos grupos no difiere significativamente (p=0.164) de acuerdo al análisis PERMANOVA.