Introducción.
La acuacultura es una actividad agropecuaria con potencial en México, la trucha arcoíris y tilapia son especies que se cultivan, teniendo una producción de 67,192 toneladas para el 2018. La producción en las unidades acuícolas, con altas densidades de cultivo, sin embargo, se ha determinado que los peces son más susceptibles a los agentes infecciosos. Por otra parte, la OIE menciona perdidas en la acuacultura por 6 mil millones de dólares al año, debido a enfermedades, además se espera el brote de nuevas enfermedades. Para controlar y tratar a los peces afectados por bacterias, se ha recurrido al uso de los antibióticos, sin embargo, se ha reportado que diversas especies de bacterias han adquirido resistencia a múltiples antimicrobianos. Las bacterias que afectan al cultivo de trucha arcoíris y tilapia son Aeromonas hydrophila, Listonella anguillarum, Edwarsiella tarda y Streptococcus iniae. Se ha buscado nuevas alternativas para combatir agentes bacterianos como los extractos de plantas, los cuales, contienen diversos compuestos secundarios como alcaloides, terpenos, taninos, saponinas, glucósidos y flavonoides, que han demostrado tener una actividad antibacteriana en estudios in vitro. El objetivo del presente estudio fue evaluar la actividad antibacteriana del extracto hidroalcohólico de Salix babylonica (EHSb) sobre Aeromonas hydrophila, Listonella anguillarum, Edwardsiella tarda y Streptococcus iniae, las cuales provocan alta mortalidad en la producción de trucha arcoíris y tilapia.
Material y Métodos: Para la obtención del EHSb se utilizaron 250 g de las hojas previamente secadas a la sombra, posteriormente se realizó una maceración con 1000 ml de una solución hidroalcohólica (70 % agua y 30% metanol).
Las cepas utilizadas fueron A. hydrophila CAIM347, L. anguillarum CAIM763, E. tarda CAIM1875 y S. iniae CAIM527, obtenidas de la Colección de Microorganismos de Importancia Acuática (CAIM) del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo de Mazatlán, Sinaloa, México (CIAD).
La actividad antibacteriana del EHSb se determinó por medio de la Concentración Mínima Inhibitoria (CMI) y la Concentración Mínima Bactericida (CMB).
Los datos obtenidos de la CMI y CMB fueron analizados mediante un análisis de varianza (ANOVA) y para determinar diferencias entre tratamientos se realizó una prueba de Tukey (P < 0.05), en el paquete estadístico SAS versión de 9.0.
Resultados: El EHSb tuvo la capacidad de inhibir el crecimiento de las cepas evaluadas. Existió diferencias estadísticas significativas (p=0.0001) entre los tratamientos. La mejor actividad inhibitoria del EHSb se presentó sobre L. anguillarum (1.56 mg/mL), seguida de E. tarda (3.12 mg/mL) y con menor actividad inhibitoria sobre A. hydrophila y S. iniae (25 mg/mL) (Tabla 1).
Los resultados obtenidos de la CMB indican que el EHSb tiene actividad bactericida contra las bacterias evaluadas. La mejor CMB se observó sobre L. anguillarum (3.12 mg/mL), seguido de E. tarda y S. iniae (25 mg/mL), la menor actividad sobre A. hydrophila (100 mg/mL) (Tabla 1). La relación entra la CMB y CMI indica que el EHsb presenta un efecto bactericida sobre las cepas evaluadas.
Conclusión: El EHSb presenta actividad antibacteriana sobre las cepas evaluadas, por lo tanto, podría ser una alternativa para el control y tratamiento de las bacterias evaluadas las cuales afectan al cultivo de tilapia y trucha arcoíris.