La gamitana (Colossoma macropomum) es una de las especies de mayor cultivo en la amazonía peruana, sin embargo, se necesita de estrategias que contribuyan con la sostenibilidad y rentabilidad de la producción. Una de estas estrategias involucra el manejo adecuado de la nutrición y alimentación de la especie. Los requerimientos nutricionales van disminuyendo a medida que los peces aumentan su edad y tamaño, por lo que es importante conocer el momento óptimo para realizar el cambio de alimento de una etapa temprana a otra más tardía. Para ello, se utilizan programas de alimentación utilizando alimentos balanceados de inicio, crecimiento y acabado, con diferentes tamaños de partícula, que se suministran en cantidades adecuadas de acuerdo a la etapa de cultivo (periodo óptimo de cambio de dieta). De esta manera se asegura una alimentación para promover el máximo potencial de crecimiento.
La evaluación consiste en tres programas de alimentación, utilizando los resultados de requerimientos nutricionales para gamitana obtenidos en el LINAPC (Laboratorio de Investigación en Nutrición y Alimentación de Peces y Crustáceos). El periodo experimental de 180 días, utilizando las instalaciones de la Universidad Nacional del Centro del Perú, Satipo-Junín, ubicada en la selva alta del Perú. Alevines de gamitana de 27g fueron distribuidos en 9 estanques de tierra (79 peces por unidad experimental), bajo el diseño estadístico DCA. Los peces del programa I con alimento de inicio durante 90 días, alimento de crecimiento por 60 días y alimento de acabado durante 30 días; el programa II con el alimento de inicio durante 60 días, alimento de crecimiento 60 días y alimento de acabado 60 días y las gamitanas del programa III utilizando el alimento de inicio durante 30 días, alimento de crecimiento 60 días y alimento de acabado durante 90 días.
Los resultados preliminares durante 90 días de evaluación, se muestran en el Cuadro 1. Se observa que no existen diferencias significativas en los parámetros de consumo de alimento diario y ganancia de peso. Se observan diferencias significativas en la conversión alimenticia a favor de los programas II y III.