La producción acuícola es una industria que se ha venido creciendo en las últimas décadas, tanto en la magnitud de la producción como en los niveles de tecnificación . De la mano con este proceso se ha dado una proliferación de enfermedades emergentes. Múltiples reportes de brotes devastadores en las producciones producto de enfermedades virales, bacterianas, micóticas muestran serios impactos económicos en la actividad acuícola . Como resultado, la OIE establece protocolos sanitarios que procuran la prevención de la aparición de las enfermedades y la contención y mitigación de los brotes que puedan aparecer.
Paralelo a este proceso surge una tendencia en mejorar las técnicas de cultivo de manera que reduzcan el riesgo sanitario, resguarden la salud ocupacional y garanticen la responsabilidad social y ambiental, en el marco de la sostenibilidad de la producción. Este tipo de técnicas difunden ampliamente mediante lo que se conoce como manuales de buenas prácticas de manejo (BPM) . Así mismo, surge una tendencia por la generación de Certificaciones de Mercado, fundamentadas en BPM, vinculadas a organizaciones no gubernamentales y entidades comercializadores.
Las grandes fincas productoras han apostado a estas estrategias para resguardar, no solo su mercado, si no la sostenibilidad de sus producciones. Sin embargo, estas medidas tienen un costo significativo, por lo que los productores artesanales en ocasiones no están en capacidad de asumirlos. Como resultado, existe una importante cantidad de fincas artesanales o con bajos niveles de tecnificación que no siguen BPM, poniendo en riesgo sanitario el resto de las producciones de la localidad.
Este trabajo utiliza la información de diversas certificaciones y manuales de BPM en diferentes cultivos acuícolas para la generación de un índice de vulnerabilidad a las enfermedades en fincas acuícolas.
El índice considera tres niveles de factores para su cálculo. El nivel basal de característica aditiva corresponde a los Factores de vulnerabilidad. El segundo nivel, con característica factorial se refiere a los Factores de Riesgo de Transmisión. Por último, el nivel superior con carácter exponencial se refiere a los F actores Acumulativos.
Se desarrolló una matriz estandarizada de evaluación de cada uno de los componentes que permite el cálculo del índice para cada finca. Estos resultados se pueden comparar con otras fincas.